Opera en Aguascalientes un grupo que está
defraudando con escrituras falsas para lo cual sus integrantes suplantan
identidades, obtienen información de Catastro, tramitan certificados de no
gravamen, sacan copias de títulos de propiedad y hasta pagan el predial de
fincas y predios en evidente desuso y aparente falta de posesión, advirtió el
notario público en retiro, Arturo Orenday.
Sostuvo que su intrusión en la entidad ha
sido detectada a través de eventuales apariciones en los despachos de al menos
5 fedatarios del Estado, donde se han presentado en calidad de representantes
de los dueños a fin de llevar a cabo traslados de dominio y para lo cual
exhiben copias de documentos e identificaciones que han resultado falsas.
La alerta inmobiliaria la ha lanzado el
propio Colegio de Notarios hacia las más de 60 notarías públicas en funciones,
luego del reporte de intentonas de defraudación, con la recomendación de que
trabajen exclusivamente con escrituras originales y no acepten copias,
especialmente en casos de predios y fincas rústicas.
Y es que este tipo de inmuebles son el
blanco de los defraudadores quienes operan en similitud a un caso detectado,
denunciado y bajo investigación en Guadalajara, Jalisco, donde a través de una
notaría que hoy está suspendida, se llevaron a cabo actos de defraudación con
inmuebles.
En ese sentido, dijo que hay pruebas de
que se han obtenido copias de escrituras en el Registro Público de la Propiedad
con las que hacen trámites en el Centro de Atención Municipal, operando
traslados de dominio validados oficialmente, sin ser los propietarios de los
bienes.
Arturo Orenday señaló que en las últimas
dos semanas este tipo de actos se han detectado en 5 notarías públicas del
estado donde se descubrieron 2 credenciales del INE con la misma foto, pero
diferente nombre; un poder y una escritura falsos acompañando un certificado de
libertad de gravamen, la firma de una mujer que falleció en los años 70 pero
que quería vender un bien a su nombre y la solicitud de trámites diversos en
otros despachos notariales, donde van a ver “si pega”.
Consideró que sin duda el objetivo es sorprender a potenciales compradores de buena fe y por supuesto al titular de la fe pública, de ahí el llamado a no operar con copias de documentos y mantenerse en alerta ante estas actividades ilícitas que han elegido preferentemente inmuebles al oriente y al poniente de la ciudad, concluyó.