La era de Diego Aguirre al frente del Cruz Azul inició con el pie derecho, ya que La Máquina se impuso en tanda de penales 4-3 al Atlas para quedarse con la Supercopa de la Liga MX. Este encuentro puso frente a frente a los últimos dos ganadores del Campeón de Campeones. Julián Quiñones fue luz y sombra en este encuentro, pues primero forzó a que el partido se fuera a la definición desde los once pasos, tras anotar el 2-2 al 91′, pero luego falló de fea manera el quinto tiro de los rojinegros, volando el esférico y permitiendo