Aguascalientes, Aguascalientes,
11 de octubre. – Con motivo del centenario del natalicio de la rejoneadora Conchita
Cintrón, la reconocida Peña Taurina “Mal de Montera” y el Consulado del Perú en
Guadalajara, en coordinación con el Lienzo Charro ‘Ignacio Zermeño Padilla’, el
Fomento Cultural Tauromaquia Hispanoamericana y la Plaza de Toros ‘Nuevo
Progreso’ realizarán un magno homenaje a “La Diosa Rubia del Toreo”, mismo que
constará de un amplio e interesante programa de actividades a celebrarse los
días sábado 15 y domingo 16 del presente mes de octubre, siendo éste el
siguiente:
Sábado 15 de
octubre. Lienzo Charro ‘Ignacio Zermeño’.
10:00 Horas.
Inauguración.
10:30 Horas.
Semblanza de Conchita. Por Fernando Castello Branco Cintrón.
11:30 Horas.
Presentación del libro “Conchita Cintrón en el Perú”. Autor. Dikey Fernández.
13:00 Horas.
Exhibición de suertes charras. Asociación de Charros Hacienda Santa Cruz del
Valle. Escaramuza ‘Las Alteñitas’.
15:00 Horas.
Comida. Rifa Sorpresas Admisión $500.00 pesos.
Nota. El público
que desea asistir a los eventos de estos eventos y no se quede a la comida sólo
pagará $100.00 pesos.
Domingo 16 de
octubre. Plaza ‘Nuevo Progreso’
13:15. Horas.
Develación de Placa alusiva en Patio de Cuadrillas.
14:00 Horas. Misa
Capilla de la Plaza de Toros.
17:00 horas.
Entrega de reconocimientos en el ruedo de la Plaza de Toros por parte de Peñas
Taurinas.
Cabe recordar que
Conchita Cintrón nació un 9 de agosto de 1922 en Antofagasta, Chile, y poco
tiempo después la familia se mudó a Lima, Perú, por lo que Conchita adquirió la
nacionalidad peruana, incluso de desempeño como diplomática en el servicio
exterior peruano.
Cuando aún era muy
jovencita, practicó la equitación y casi al mismo tiempo también el rejoneo.
Así, con su maestro de equitación, rejoneo y toreo Ruy Da Camara, empezó sus
presentaciones en el Perú. Ahí la vio actuar el matador mexicano Chucho
Solórzano, quien la convenció de venir a México y hacer campaña taurina,
presentándose en 1939 con apenas 17 años.
Después de su presentación,
empezaron a sumarse los contratos y logró sentar precedente de gran caballista
y torera de a pie incursionando incluso en plazas de España, Francia y
Portugal, actuando sólo en festivales, pues en los países taurinos de Europa no
se permitía a las mujeres actuar en corridas formales.
Conchita toreaba
sus toros en puntas aún para el rejoneo, con el que muchos toreros y
rejoneadores de su época preferían no alternar con ella, y vaya que se codeó
con los más grandes de allá y aquí, mismos que le respetaban grandemente por su
valor y torerismo.
Ya retirada y
casada con un destacado ciudadano portugués, Don Francisco Castello Branco, se
estableció en Guadalajara, Jalisco, en donde la familia completa se asentó
varias décadas, formando parte de su sociedad y teniendo especialmente muy
cercanas amistades con los charros y gente de a caballo. Por dicha razón, es
que se pensó hacer en dicha ciudad un gran homenaje en el Lienzo Charro
‘Ignacio Zermeño’, donde se le quiere y se le respeta profundamente. (pacovargas_@hotmail.com
<mailto:pacovargas_@hotmail.com>)