1ª de 3 partes
Héctor Larios
· De los cambios en la Federación Mexicana de Futbol, A.C.
La crisis estructural que atraviesa el futbol mexicano, es la oportunidad de crecimiento y desarrollo. Es alentador ver la capacidad de autocrítica del nuevo Comisionado Juan Carlos Rodríguez. Cambiar al entrenador nacional es solamente la punta del iceberg.
Sí, realmente quiere un cambio verdadero la sacrosanta Femexfut tiene una tarea importante que realizar antes de tomar de decisiones.
El mensaje del Comisionado Juan Carlos Rodríguez, es fuerte y claro, “le hemos fallado a la afición, se siente lastimada, está enojada, y con razones de sobra”. Se dirige directamente al espectador, por redes sociales de le FMF, no convoca a rueda de prensa, lo hace directo dando una imagen de fuerza e intención de cambio. La coyuntura es favorable para un análisis profundo y el diseño e instrumentación de programas en cada una de las áreas federativas.
La rápida reacción ante los recientes resultados de la selección mayor avizora una sacudida mayor. Primero porque Diego Cocca y Ares de Parga, son personajes heredados y seguramente traerá a su personal de confianza. Los argumentos son desorden en la toma de decisiones, transparencia en la toma de decisiones. Además, de problemas en la planeación, logística, funcionamiento y liderazgo.
La falta de proceso, y atmosfera que le rodea limitan el tiempo y No hay tiempo que perder, dijo el nuevo mandamás federativo.
Así fueron las razones para llamar a Jaime Lozano.
Hoy se fue Cocca, ayer fue Martino, antier fue Osorio, quién será el próximo. El tema tendencia en las redes, con los amigos, es quién ocupará la silla del entrenador nacional. Los directivos revisaran a los posibles candidatos, la baraja nacional es corta, habrá quien piense en un extranjero más.
Sí realmente quieren ver al futbol mexicano con todo su potencial: se propone:
La guía para estudio del futbol mexicano consta de tres apartados.
A) Desde la cancha
B) Estructura federativa
C) Sector Amateur
El análisis debe partir de la cuál es la visión del futbol dentro de la industria del entretenimiento en el mundo globalizado.
Proceso de selección de entrenadores nacionales
– Deberá definir el perfil del personal en todas las áreas del staff multidisciplinario para avanzar en la profesionalización.
Se marquen cuales son las metas de resultados, y metas de realización. Como control de calidad en los avances del proceso, y no que se corten los procesos por la urgencia de resultados.
Un ejemplo, en los últimos 15 años han pasado 10 entrenadores, uno cada año y medio. Y recientemente Diego Cocca, duró 129 días, siete partidos.
La selección no es una mercancía fast food, no son enchiladas. Construir un equipo competitivo requiere tiempo y calidad en sus actividades, para ello es necesario profesionalizar todas las áreas.
– Erigir una estructura en todas las ramas de la FMF, para acelerar la producción de futbolistas de calidad que contribuya al crecimiento del universo para el reclutamiento de los clubes.
– Construir una Imagen Ganadora, se necesita de más y mejores jugadores. Actualmente los futbolistas de las selecciones menores ninguno es titular de sus equipos de primera división.
· En la designación del DT, subrayar su conocimiento del futbol internacional, incluido el futbol mexicano, equipos y competencias. Porque llegan a todas las categorías, sin conocimiento de causa, hay experiencias de quienes trabajan como si fuera un equipo y la curva de aprendizaje hace lento el proceso y en consecuencia no se logran los objetivos trazados.
Un seleccionador nacional debe también construirse. Es decir, deberá ser el alumno más aplicado del técnico actual que brinde la experiencia para asumir el cargo a mediano o largo plazo. Por este motivo, los auxiliares deberán tener una preparación actualizada, comprometida con el proyecto, trabajar en equipo y no ser los “amigos” del entrenador en turno, o que sólo diga, sí señor.
· El tiempo de un seleccionador es limitado, está sujeto a resultados, por lo que debe tener claros los objetivos y metas del proceso en cada entrenamiento y actividad. No se pueden improvisar actividades porque la agenda de los futbolistas modernos está saturada.
· Se defina el estilo de juego previamente, es decir imponer el sello del futbol mexicano, algunos preguntaran ¿cuál es?
Ese es el punto, hay que construirlo. Para que el resto de los representativos nacionales tengan claridad hacía dónde van, y tengan claridad de qué tipo de futbolistas se requiere para la alta competencia.
Que se dote a los seleccionados de la preparación integral para asumir la responsabilidad y compromiso de vestir la playera verde. Para lo cual es preciso diseñar un plan maestro que puntualice la metodología de cada momento del proceso. Por ejemplo, el ciclo olímpico sus competencias de preparación y las competencias regionales, continentales, Juegos Olímpicos y Copas del Mundo de la categoría correspondiente. Un futbolista que cumpla este ciclo por merecimientos propios, tendría un promedio de 100 partidos internacionales y tendrá la capacidad de asumir los retos que exige el futbol de Alta competencia. Un proceso sin manosear, a pesar de haber sido campeones del mundo, se pierden en el proceso, y con ello la inversión económica.
· Qué la logística sea pertinente con las metas y no esté sujeta a intereses comerciales o caprichos personales, como en el conocido caso donde se exigía que el hotel de concentración tuviera campo de golf, aunque quedar distante del campo de entrenamiento, por ejemplo. Y muchos casos más.
Continuará…
