Yarek Ariatna Gayosso Vázquez
Agencia Reforma
París, Francia 4 agosto 2024.- Todo Brasil paró ayer por ver la competencia de su ídola Rebeca Andrade.
Tal ha sido el fenómeno de la mayor gimnasta en la historia de Brasil que el Gobierno instauró el sábado un Día Nacional para que la población viera competir a la multimedallista olímpica en la Final de Salto de Caballo, la prueba donde había mayor posibilidad de un Oro. De esa categoría es Andrade.
Había argumentos para pensarlo, pues la brasileña le había ganado la medalla Oro a Biles el año pasado en los Campeonatos Mundiales, la dejó con la Plata en el podio. Aquella vez, la nacida en Guarulhos, Sao Paulo, le arrebató el título mundial número 22 a la originaria Estados Unidos.
«Perfección», «Es nuestra Simone Biles», «Es maravillosa», «Todo el mundo paró para seguir a Rebeca hoy», «Es un fenómeno», decía la comunidad brasileña en la Arena Bercy.
Ver a Rebeca corriendo hacia el caballo es como ver pasar a una gacela a toda velocidad en brillantes azules sobre un leotardo blanco.
«Rebeca es la número uno, para nosotros está equiparada como Biles. Estábamos confiados en que teníamos oro. Es muy querida por todos. Ella tiene un salto solamente de ella», cuenta Ana.
Andrade, hoy Plata, lideró al equipo brasileño para ganar la medalla de Bronce en conjunto días antes, la primera presea de este tipo en la historia de su país, un reconocimiento que hace sentir orgullosas a las brasileñas.
«Fue muy emocionante ver a Rebeca representando Brasil. Es de otro nivel», expresa Isabella con la bandera de su país.
@YGayossoCANCHA
