Pagas sólo el mínimo de
tu tarjeta de crédito, conoce los riesgos, pues se puede convertir en una
tortura.
Al pagar solo pagar el
mínimo puede ocasiona que la deuda no disminuya y que los intereses se vayan
acumulando, lo que te hará acreedor de una deuda interminable.
La tarjeta de crédito
se ha convertido en una herramienta muy útil para quienes no son partidarios
del dinero físico. No obstante, debemos recordar que su uso conlleva una gran
responsabilidad, pues puede ser un gran aliado de nuestras finanzas o nuestra
peor tortura, si es que no la manejamos de manera correcta.
Las tarjetas manejan el
llamado “pago mínimo”, es decir, un pago obligatorio que debes pagar al mes,
por cierto tiempo, para mantener tu crédito vigente.
Un ejemplo:
Tienes una deuda de 10
mil en tu tarjeta, una tasa de interés del 55 por ciento y un límite crediticio
de 25 mil.
Ahora, el banco te pide
que, para liquidar tu deuda, tienes que hacer 234 pagos mensuales de 312.50.
Algo que, a primera
vista, parece algo “relajado” y “fácil de cumplir.”
Bueno, hagamos una
cuenta a largo plazo: Pagos de 234 mensuales es igual a 19 años con 6 meses y
terminarías pagando un total de 91 mil 738 pesos, es decir, 9 veces más de la
deuda original.
Esto pasa porque la
deuda genera intereses que se acumulan al saldo de la cuenta, lo que implica
que la deuda no disminuya o lo haga ligeramente. A lo anterior se le añade la
comisión por anualidad. Por ello, tu deuda pareciera infinita, ya que las
comisiones y los intereses la hacen así.