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Las fuerzas israelíes aseguran
que el campamento de Yenín es «un bastión terrorista» y que allí
tienen instalaciones los grupos radicales
Al menos ocho
personas han perdido la vida y más de medio centenar han resultado heridas,
diez de ellas actualmente en estado grave o crítico, tras el inicio de un
operativo de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en un campamento de
refugiados de Jenín, Cisjordania.
Las fuerzas
israelíes aseguran que el campamento de Yenín es «un bastión terrorista» y que
allí tienen instalaciones los grupos radicales. En total, más de mil elementos
del Ejército fueron desplegados, considerado como el operativo de mayor envergadura
en Cisjordania en 20 años.
El operativo,
además de ser terrestre, incluyó ataques aéreos y el uso de drones contra
posibles centros de mando o almacenes de municiones y de armas, publicaron una
foto de un supuesto laboratorio de producción de explosivos en el campo de
Jenín.
En redes
circulan videos en los que excavadoras israelíes destrozan el pavimento de las
calles en un aparente intento por limpiar las zonas de posibles minas colocadas
por milicias palestinas. Afirman que también hay daños en viviendas y
mezquitas.
El ministro de
Defensa de Israel, Yoav Gallant, aseguró que el operativo se está llevando a
cabo «según lo planeado» y afirmó que las tropas recibirán «pleno apoyo» para
hacer «lo que sea necesario» y asegurar «la plena libertad de acción» en
Cisjordania.
Los operativos y ataques por parte de Israel se han agudizado desde el año pasado con incursiones de Israel en Cisjordania tras una serie de ataques contra su territorio de los que culpa a los grupos armados palestinos. Países como Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Jordania ya han expresado su condena por la incursión israelí.
