LOS ESTIGMAS PROVOCAN DIAGNÓSTICOS TARDÍOS

0

Cáncer de próstata

  • En México, esta patología ocupa el primer lugar en incidencia, genera al año 25 mil nuevos casos que deja 7 mil muertes: Víctor Gómez, de la Facultad de Medicina

Patricia López Suárez   

Ciudad Universitaria, CDMX, 12 junio 2025.- Los síntomas son urgencia para orinar más seguido, ardor y presencia de sangre.

Mil hombres mueren cada día en el mundo por cáncer de próstata, la segunda causa de cáncer varonil a nivel global y la neoplasia más frecuente del aparato genitourinario masculino.

Cada año en el planeta hay más de 1.4 millones de casos nuevos y alrededor de 375 mil muertes, con mayor incidencia en Europa Occidental, Oceanía y Estados Unidos.

“Pero en los países de ingresos bajos como el nuestro, hay mayor mortalidad, pues la detección se realiza en etapas avanzadas y se llega tarde al diagnóstico”, advirtió Víctor Gómez Bocanegra, epidemiólogo y académico del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM.

En conferencia de medios a propósito del Día Mundial del Cáncer de Próstata, que se conmemoró el 11 de junio, el especialista comentó que en México esta patología tiene el primer lugar en incidencia, más de 25 mil casos nuevos por año y más de 7 mil muertes en ese lapso, con diagnóstico tardío en muchos casos.

En el Auditorio Gilberto Guevara Rojas de la FM, Gómez Bocanegra hizo un llamado a la acción, ya que existe una gran resistencia en los varones para acudir al médico ante los primeros síntomas de problemas en la próstata, como son la urgencia de orinar más seguido, ardor, flujo débil de orina y presencia de sangre en ésta.

“Es ahí donde el hombre calla, por orgullo, por miedo. El cáncer de próstata da señales suaves, lentas, que muchos ignoran incluso por vergüenza”, señaló.

Aseveró que en etapas tempranas es una enfermedad tratable, pero al estar en un periodo latente durante mucho tiempo, desafortunadamente casi mil hombres mueren cada día en el mundo.

El riesgo de padecer esta enfermedad aumenta con la edad, por lo que los hombres deben examinarse a partir de los 40 años, con regularidad de un año, alertó.

“Hay factores de peligro que podemos evitar, como el consumo de carnes animales (principalmente rojas), grasas y productos procesados. El sobrepeso y la grasa abdominal están asociados a un cáncer más severo. En cambio, debemos consumir omega-3 presente en pescados y licopeno contenido en frutas y verduras”, recomendó.

En tanto, Félix Santaella Torres, jefe del Departamento Clínico de Urología del Centro Médico Nacional La Raza del IMSS y profesor de la especialidad en Urología en el Posgrado de la FM, consideró que la responsabilidad del cuidado de la salud es de nosotros mismos. “El consumo excesivo de alcohol, tabaco, carbohidratos y grasas nos afecta”.

Insistió en la necesidad de realizarse, al menos cada año, dos análisis: uno de sangre para medir el antígeno prostático (una proteína producida por las células de la próstata que se utiliza para monitorear el cáncer de esa glándula), y el tacto rectal, una exploración médica donde el urólogo introduce un dedo lubricado y con guante en el recto para palpar la próstata e identificar posibles anormalidades que podrían indicar cáncer o inflamación.

El urólogo reconoció que la incidencia del cáncer de próstata en México está en aumento. “Nuestras tasas de detección son en etapas avanzadas. En el mundo desarrollado se detecta en fase temprana un tumor de próstata en el 76 % de los pacientes, mientras en nuestro país se detecta entre el 35 y 45 % de los casos, por eso es un problema de salud pública que afecta la mortalidad y los costos sanitarios”.

Santaella Torres indicó que en México el diagnóstico en etapas avanzadas significa que el tumor ya se fue a otros órganos y existe metástasis.

“Cuando esto sucede, ya hemos perdido la oportunidad para curar. Lo que hacemos entonces es tratar la enfermedad para contenerla y dar cuidados porque estas etapas ya comprometen la vida del paciente, y antes de ello su función y su calidad de vida”, subrayó.

Por eso es importante la prevención, mantener una vida saludable y aumentar el diagnóstico en etapas tempranas, para no impactar en la muerte por cáncer de próstata. “Una vez hecho el diagnóstico temprano, el manejo del paciente debe ser individualizado”, finalizó.

FUENTE: UNAM

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *