El grupo surcoreano de
k-pop, BTS, aprovechó este martes una visita a la Casa Blanca con el Presidente
Joe Biden para denunciar el racismo contra personas de origen asiático en
Estados Unidos.
El cantante Park Ji-min, más conocido como Jimin, dijo que el grupo está
«devastado por la reciente oleada de delitos de odio» contra personas
de origen asiático, según un traductor.
Otro miembro, Suga, hizo un llamamiento a la tolerancia: «No está mal ser
diferente. Creo que la igualdad comienza cuando nos abrimos y aceptamos todas
nuestras diferencias», afirmó en el estrado de la sala de prensa de la
Casa Blanca, que estaba abarrotada.
Vestidos con trajes oscuros y corbatas a juego sobre camisas blancas, los siete
reyes del k-pop llegaron a Washington con un mensaje serio.
Biden les invitó para hablar con ellos «de la inclusión y la
representación» de las personas asiáticas y de los delitos racistas y la
discriminación contra esa comunidad, según la Casa Blanca.
El racismo y la violencia contra los asiáticos han aumentado en Estados Unidos,
en una tendencia que muchos atribuyen a las consecuencias de la pandemia de
Covid-19.
Donald Trump, el líder republicano predecesor de Biden, se refirió con
frecuencia a la pandemia como «el virus de China», país donde se
detectó el primer brote en 2019.
El incidente más grave se registró en la zona de la ciudad de Atlanta, donde un
hombre mató a tiros a ocho personas en un salón de masajes. Seis de ellas eran
mujeres asiáticas.
La Casa Blanca elogió a los miembros de BTS como «embajadores de la
juventud que difunden un mensaje de esperanza y positividad en todo el
mundo».
En 2021, los chicos del grupo registraron ingresos anuales récord de más de mil
millones de dólares, gracias al contenido en línea y las ventas de álbumes.
Biden, de 79 años, se ha acercado a jóvenes famosos y personas influyentes en
las redes sociales para tratar de inyectar algo de glamour a los mensajes de su
equipo sobre temas sociales y de salud.
Contó, por ejemplo, con la cantante de pop Olivia Rodrigo y los Jonas Brothers
en campañas para convencer a los jóvenes estadounidenses de que se vacunaran
contra el Covid-19.