· Al conmemorarse el Día Mundial del Donante de
Sangre, el 14 de junio, Rocío Valdez Labastida y Paula Santiago Martínez
destacan que prevalece falta de información, creencias y mitos
La estancia
para donar sangre en alguno de los 464 bancos que hay en México puede durar de
50 minutos a una hora, tiempo durante el cual se lleva a cabo el proceso in
situ y la extracción; los beneficios son de largo aliento, porque con
450 mililitros podrían salvarse tres vidas y mejorar la de quien la
proporciona, consideran especialistas de la Facultad de Enfermería y
Obstetricia de la UNAM.
La
académica y secretaria de Atención a la Comunidad Estudiantil, Rocío Valdez
Labastida, indica que aumenta la esperanza de vida, mejora las condiciones ante
enfermedades letales, y permite llevar a cabo procedimientos quirúrgicos de
manera segura.
Para
quien dona es benéfico, aclara la docente Paula Santiago Martínez, porque
favorece el flujo sanguíneo, reduce el riesgo de padecer infartos, accidentes
cerebrovasculares, renueva el proceso celular y equilibra dichas funciones o
depósitos de hierro.
Y
añade: “450 mililitros representan solo el siete por ciento de la sangre de un
donante, y no contribuye a ninguna inestabilidad en ella o él; hay que acercar
ese tipo de información a la población en general. Cabe mencionar que dos de
los tipos de sangre muy difíciles de obtener son: O Negativo, y la de tipo AB”.
A
propósito del Día Mundial del Donante de Sangre, a conmemorarse el próximo 14
de junio, la también médico cirujana expone que se cuenta con una estadística
en México sobre el grupo de sangre que predomina. “Se trata del A Positivo y el
O Positivo con una estadística aproximada de 36 por ciento, y uno menor que es
el O Negativo con un siete por ciento, conminamos a la población en general a
que conozca su grupo sanguíneo”.
Mitos
y verdades
De acuerdo con Rocío Valdez, las causas de resistencia a este gesto solidario
se manifiestan, incluso, estadísticamente: falta de información, por
situaciones médicas, pero sobre todo por creencias y mitos. “Aunque en general
todo esto está enmascarado por el miedo a una venopunción, y por lo que pueda
suceder después; eso se reduce a falta de información”.
“El
miedo también puede ser un motivo, aunque debemos saber que la sangre es un
tejido que se regenera. El volumen total que nosotros donamos se reestablece
entre cuatro y cinco horas. Los glóbulos blancos en 12 horas, las plaquetas en
tres días, y los que llevan más tiempo son los glóbulos rojos que tardan ocho
semanas”, abunda.
La
también Premio Nacional “Isabel Cendala y Gómez” 2013, que otorgaba la
Secretaría de Salud a la Mejor Enfermera del Año, precisa que entre una
donación y otra deben transcurrir de tres a cuatro meses, por lo que una
persona sana podría llevarlo a la práctica tres veces en un año.
Los
cuidados posteriores deben incluir una buena alimentación, rica en hierro,
proteínas y restitución de líquidos vía oral, además de tener un reposo
relativo, apuntó.
Los
mitos más comunes para evitar ofrecer este tejido, señala Valdez Labastida,
son: ingesta de algún medicamento, cuando sí se puede realizar dependiendo del
tipo de este, incluso al estar bajo tratamiento antihipertensivo.
Otro
es haber padecido hepatitis. “Esta enfermedad generalmente cuando la contraemos
de pequeños es de tipo A, lo que sí es compatible con la donación”.
Fumar,
estar en periodo menstrual, incluso hablar de tatuajes y piercings deben
impedirlo con seguridad. “Si ya han transcurrido seis meses desde tu último
tatuaje, y en el caso de los piercings si te lo practicaron en
un sitio con adecuadas medidas sanitarias pueden pasar incluso 12 horas para
que puedas donar”, asegura.
La
académica informa que la tasa de donación por cada mil habitantes en México,
según el Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea, en 2020 fue de 6.8, y de
esta cifra solo tres por ciento fueron donadores altruistas.
Agrega que la Organización Mundial de la Salud esperaría que para 2024, por lo
menos, uno por ciento de la población donara. Somos 128 millones de habitantes,
deberíamos tener -por lo menos- un millón 280 mil donantes. A nivel mundial,
los países de altos ingresos económicos tienen 32.6 por ciento de tasa por cada
mil habitantes.
FUENTE: UNAM