Elon Musk declaró
que no procederá con su adquisición de 44 mil millones de
dólares de Twitter Inc a menos que el gigante de las redes
sociales pueda demostrar que los «bots» representan menos
del 5 por ciento de sus usuarios, lo que arroja
aún más incertidumbre sobre
el acuerdo.
El multimillonario tuiteó «este acuerdo no puede
avanzar» a menos que Twitter proporcione pruebas de sus afirmaciones, reiterando
su propia opinión de que la proporción es mucho mayor.
El último pronunciamiento en línea
de Musk complica una adquisición ya caótica, potencialmente
una de las adquisiciones más grandes que haya visto la industria de internet.
Recientemente se enfrentó en línea con el director ejecutivo de Twitter, Parag
Agrawal, sobre la forma en que el gigante de las redes sociales contabiliza
los «bots», alimentando la especulación de que Musk podría intentar
bajar el precio o incluso retirarse.
Las acciones de Twitter cayeron otro 3.2 por ciento en
las operaciones previas a la comercialización en Nueva York, luego de
caer más del 8 por ciento el día anterior.
El diferencial entre el precio de oferta de Musk de 54.20
dólares y su último precio de cotización es actualmente de alrededor
del 40 por ciento, lo que sugiere que los inversionistas piensan que hay pocas
posibilidades de que el acuerdo se realice sin un descuento, si es que se hace.
Twitter dijo este martes en un comunicado que está
«comprometido con completar la transacción en el precio y los términos
acordados tan pronto como sea posible».
«Si Musk y Twitter llegan a un acuerdo revisado», dijo Dan Ives,
analista de Wedbush, «probablemente será a un precio mucho más bajo una
vez que las negociaciones se hagan cargo y se realice la diligencia en torno a
Twitter DAU y los problemas de los algoritmos.
La adquisición propuesta incluye una multa de término de
mil millones de dólares para cada parte, que Musk tendría que pagar si termina
el trato o no entrega los fondos de adquisición como prometió.
No está claro si una actualización de Twitter sobre la cantidad de cuentas
falsas, si es materialmente superior al 5 por ciento, desencadenaría la
llamada cláusula de efecto adverso material, liberando a Musk del
pago de la multa.
El último aluvión de tuits de la persona más rica del mundo es
otro giro en el intento de Musk de apoderarse del sitio de microblogs. Un
usuario prolífico con más de 90 millones de seguidores, reveló una participación
de más del 9 por ciento en la compañía el mes pasado, luego lanzó una
oferta de adquisición no solicitada, sin planes de financiamiento detallados,
todo en cuestión de semanas.
Musk provocó que las posibles grietas en el acuerdo se ampliaran la
semana pasada cuando tuiteó que su oferta para comprar Twitter estaba «temporalmente
en pausa» hasta que obtuviera más información sobre la proporción
de cuentas falsas. Aproximadamente dos horas después, Musk afirmó en otro tuit
que «todavía estaba comprometido» con el acuerdo.
De acuerdo con Agrawal, la plataforma suspende más
de medio millón de cuentas que parecen falsas cada día, muchas veces antes de
que estas sean públicas y que cada semana bloquea a millones de supuestos
usuarios por sospechas de que son cuentas manejadas por una aplicación de
ordenador.
Los análisis internos muestran que menos de 5 por ciento de las cuentas activas
en un día promedio son calificadas como «spam«, pero estas
cuentas no pueden ser replicadas por terceros debido a los requerimientos de
privacidad, aseguró Agrawal.
Afirma Musk que ‘bots’ son una plaga
Elon Musk respondió a la explicación de Agrawal
en un tuit que los «bots» son una plaga en Twitter y
considera como una prioridad deshacerse de ellos si toma el control de la
plataforma.
«¿Entonces los anunciantes saben lo que reciben por su
dinero?», agregó Musk en otro diálogo sobre la necesidad de probar que los
usuarios de Twitter son todos personas.
Musk sentenció que «esto es fundamental para la salud financiera de
Twitter».
El procedimiento para estimar cuántas cuentas son «bots» ha sido
compartido con Musk, insistió Agrawal.
El analista de Wedbush Dan Ives indicó en una nota a los inversionistas que el
tema de las cuentas falsas está haciendo que el acuerdo se
vuelva confuso.
«El tema de los ‘bots’ al final de cuentas es algo conocido hasta por los
taxistas de Nueva York y parece más a una excusa del tipo ‘el perro se comió mi
tarea’ para salirse del trato sobre Twitter o para lograrlo a un precio más
bajo», señaló el experto.
Musk ha afirmado que su motivación de compra surge de un deseo
de asegurar que haya libertad de expresión en la plataforma y
para impulsar la monetización de una página que es muy
influyente pero que tiene dificultades para tener un crecimiento que sea rentable.
El empresario también se declaró a favor de levantar
el veto en la plataforma contra el
ex Presidente estadounidense Donald Trump que fue impuesto después de
que después de que sus partidarios, enfervorizados por sus tuits que alegaban
fraude electoral, atacaron el Congreso de Estados Unidos el 6 de enero de 2021.