La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) emplea un georradar para detectar anomalías en el subsuelo del segundo domicilio sujeto de investigación, propiedad del presunto feminicida serial Andrés «N», ubicado a 200 metros del primer inmueble, donde fueron extraídos cuatro mil 300 restos óseos y habría 19 víctimas.
La Fiscalía informó por la noche que este miércoles inició el cateo en el segundo inmueble de la colonia Lomas de San Miguel, en este municipio, como seguimiento a una investigación iniciada por la desaparición y feminicidio de una mujer en mayo del año pasado, y se prevé que se extienda por varios días.
La FGJEM inició el cumplimiento a este mandamiento judicial con un equipo interdisciplinario de Policías de Investigación, Ministerio Público y Peritos expertos, mismos que buscan en el lugar posibles indicios que pudieran estar relacionados con diversos delitos.
La Fiscalía dio a conocer que el equipo de la institución es apoyado por elementos de la Secretaría de Seguridad del Estado de México y policías municipales, quienes brindan seguridad perimetral, así como de Protección Civil y servidores públicos del Ayuntamiento de Atizapán.
Este cateo se realiza en un predio de unos 200 metros cuadrados, en el cual hay siete viviendas de diversos tamaños, repartidas en dos niveles, algunas de ellas con baño propio y otras comparten dos baños, los cuales se encuentran en dos pasillos. En este terreno se ubican dos patios, que conectan las viviendas entre sí.
Cinco de las viviendas se encontraban totalmente vacías. En otras dos fueron encontrados muebles, electrodomésticos y demás utensilios; sin embargo, no se encontraban habitadas.
Para la cumplimentación de la orden judicial se cuenta con binomios caninos que realizaron un primer rastreo en el terreno; además, arribó al lugar personal de la Comisión de Búsqueda del Estado de México (COBUPEM) con un Georradar, o Radar de Penetración Terrestre (GPR, por sus siglas en inglés), que será utilizado para detectar anomalías en el subsuelo en un lugar de búsqueda específico.
Este aparato trabaja con ondas electromagnéticas y emite una serie de impulsos a través del subsuelo, con lo que se detecta si hay materiales con diferentes propiedades a los habituales o irregularidades en la tierra. Es decir, su función principal es localizar objetos, estructuras o cavidades por debajo del nivel del suelo, explicó la Fiscalía.
Los trabajos en el lugar, encabezados por la FGJEM, se extenderán hasta completar una búsqueda minuciosa en todo el terreno.
