El año
pasado, ganó su primer título de Grand Slam en el US Open. Doce meses
después el español es una estrella del tenis mundial, o en lugar de sentirse
agobiado por esa expectativa, Alcaraz aceptó y se adaptó a la presión
adicional.
“El año
pasado afrontaba mi primera semifinal de un Grand Slam. Ahora me enfrento
a mi cuarto”, dijo Alcaraz después de su victoria en cuartos de final en sets
corridos sobre Zverev ayer en la noche.
“Me siento como un jugador totalmente diferente… me siento más
maduro. Lidio mejor con la presión [de ese] tipo de momentos”.
Pero no
es sólo la presión de los fanáticos y expertos del tenis lo que Alcaraz está
manejando mejor. Tuvo un perfecto cuatro de cuatro en puntos de quiebre
contra Zverev, convirtiendo cada uno de ellos en un ganador. También salvó
los cinco puntos de quiebre en su contra.
“Cuando
me enfrento a un punto de quiebre, trato de no pensar en esto. Intento
pensar en ello como un punto normal”, dijo Alcaraz. “Trato de hacer bien
las cosas que estaba haciendo… Si puedo regresar [y] volear, lo hago. Si
puedo subir a la red en la segunda pelota, lo hago. Eso es en lo que estoy
pensando en ese momento”.
A Carlitos le espera Daniil
Medvedev en la semifinal. “Los últimos partidos que jugué contra Daniil jugué
un juego táctico perfecto”, dijo Alcaraz. “Hice bastante bien todo lo que
tenía que hacer contra él, así que creo que mi juego se adapta bastante bien
contra ese tipo de oponente. Voy a intentar hacer las mismas cosas que
hice en Indian Wells y en Wimbledon, con suerte ganar y jugar al mismo nivel
que jugué en esos partidos”.
Aunque
Medvedev es un oponente que nadie en la gira tomaría a la ligera, Alcaraz
admitió que le ha pasado por la cabeza la idea de enfrentarse al serbio
Novak Djokovic en la gran final.
“Obviamente
está más cerca que el comienzo del torneo”, dijo Alcaraz,
sonriendo. “Sería fantástico jugar una final contra Novak aquí en Nueva
York. Ambos tenemos una semifinal realmente difícil, pero obviamente ambos
estamos buscando esa potencial final”.
