Por Héctor Larios
Ciudad México, 27
noviembre 2022.- España fue fiel a su estilo de tocar y tocar, su buena técnica
y juventud le dieron movilidad, lograron hacer asociaciones que le dieron la
posesión del balón de forma abrumadora, además, apretando en la recuperación
del mismo, obligando a impresiones en los pases teutones.
Llegadas al arco,
salvadas de Neuer o la defensa impidieron goles de la furia roja. Alemania
defendiendo en su terreno de juego. ¿Cuándo habíamos visto algo similar?
Los teutones con muchas precauciones
saltaron al campo pensando en no perder, apostando al contra golpe como arma
ofensiva, situación que se dio en el primer lapso, anunciaban de su
peligrosidad. Sin embargo, Luis Enrique, parecía no percatarse y continuó con
su tic, tac, clásicos sonidos que interpreta el cuadro ibérico.
Todo siguió igual en el
segundo tiempo, hasta que vinieron los cambios, entró Álvaro Morata, España refrescó unas líneas creando
situaciones propicias de gol, fue hasta el minuto 61 que Morata, culminó una de
tantas llegadas para el 1 a 0.
Como el gol es el
táctico, Alemania se fue al frente. España llegaba con mayores espacios,
desgraciadamente para su causa abusó del toque en media cancha, como sí la tenencia
de balón, o quién de más pases definiera al ganador, todo un cachondeo
ineficaz. Olvidaron que tenían enfrente a una Alemania que
puede andar mal, pero tiene un espíritu de lucha que no se rinde.
Al final, Füllkrug, que
entró de cambió, encuentra el gol del empate para darles vida y esperar hasta
la tercera ronda de grupos para definir a los clasificados. España se la juega
con Japón y Alemania con Costa Rica, todos tiene posibilidades de pasar a la
siguiente ronda.
Alemania está vivo, España
perdonó.