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Científicos
universitarios iniciaron una campaña de investigación para conocer los efectos
en México de este evento
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Se desarrolla con recursos financieros, administrativos y de logística de la
UNAM
Un grupo de expertos y
estudiantes de los institutos de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL) y de
Geofísica (IGEF), de la UNAM, inició un recorrido de investigación por la costa
del Pacífico mexicano a bordo del Buque Oceanográfico “El Puma”, para realizar
estudios profundos sobre los efectos que puede resentir México por el fenómeno
de “El Niño”-Oscilación del Sur (ENSO, por sus siglas en inglés).
María Adela Monreal Gómez y Martín Merino Ibarra,
investigadores del ICMyL; y Ligia Pérez-Cruz y Miguel Ángel Díaz Flores, del
IGEF, explicaron que la urgencia de estos trabajos radica en que actualmente un
evento ENSO está en pleno desarrollo y se estima que alcanzará su máxima
intensidad durante el invierno, que inició en diciembre pasado y concluye este
2024.
Luego de precisar que se trata de un fenómeno global
de variabilidad océano-atmósfera, una de las principales causas de sucesos
extremos y cambios estacionales, puntualizaron que si bien lo que ocurre en la
superficie del océano se puede valorar con imágenes de satélite, lo que sucede
bajo la superficie durante estos eventos requiere de observaciones
oceanográficas directas.
Asimismo, indicaron que la campaña emprendida este
fin de semana por la UNAM, se lleva a cabo con el apoyo de la Coordinación de
Plataformas Oceanográficas de la Coordinación de la Investigación Científica,
además del ICMyL y del IGEF, los cuales brindan los recursos financieros,
administrativos y de logística.
También resaltaron que el ICMyL y el IGEF cuentan
con personal académico, laboratorios y equipos para estudios oceanográficos,
así como con el “El Puma”, diseñado y equipado para proyectos de esta magnitud.
Destacaron la oportunidad con la que se lleva a cabo
el proyecto de investigación “Efectos de El Niño-Oscilación del Sur (ENSO) en
el Pacífico Mexicano durante el evento 2023-2024”, lo cual permitirá evaluar
las distribuciones oceanográficas de diversas variables de interés (físicas,
químicas, biológicas y geológicas) y contribuir a la comprensión
multidisciplinaria de la dinámica oceánica de los sucesos de este fenómeno en
el contexto del cambio global en proceso.
¿Qué es “El Niño”?
Es el evento global de variabilidad océano-atmósfera
más importante del Pacífico tropical. A través de teleconexiones atmosféricas,
el ENSO también es una de las principales causas de eventos extremos y cambios
estacionales; su ciclicidad es de 2 a 7 años e implica cambios en el patrón de
viento, en la temperatura superficial en el Océano Pacífico central y oriental.
El patrón de calentamiento oscilante durante “El
Niño” afecta directamente a los patrones de precipitación en los trópicos, e
influye en el clima mundial. Los primeros indicios de su presencia son el
aumento de la temperatura superficial del mar y la disminución de la
concentración de clorofila-a, respecto a los valores normales.
En ese sentido, si bien se documentan regularmente
las variaciones superficiales de temperatura y clorofila-a, para evaluar lo que
sucede en tiempo real, se requiere de observaciones oceanográficas in
situ para valorar los cambios subsuperficiales durante el ENSO. Las
anomalías subsuperficiales pueden tener importantes variaciones espaciales y
afectar a la productividad y a las comunidades planctónicas, así como a la
cascada de efectos hacia el resto de las comunidades marinas y los potenciales
pesqueros de las regiones del Pacífico mexicano.
Ligia Pérez-Cruz y Miguel Ángel Díaz Flores se embarcaron -del 26 de enero al 9
de febrero- con un grupo de académicos y estudiantes de la Universidad Nacional
para realizar la colecta de muestras y el registro de datos oceanográficos.
La realización de la expedición de la comunidad de
científicos mexicanos es crucial para comprender los impactos específicos en la
región. Al respecto surgen las siguientes preguntas de investigación: ¿Cómo
afecta “El Niño” a los patrones climáticos locales en el Pacífico mexicano y
sus regiones circundantes?, ¿Cuáles son las consecuencias de dicho fenómeno en
la biodiversidad marina en esta área?, ¿Existen patrones históricos que
permitan prever la intensidad y duración de los eventos de “El Niño” en esta
área? y ¿Cómo interactúa “El Niño” con otros fenómenos climáticos locales en el
Pacífico mexicano?
Responder estas preguntas contribuirá a su
entendimiento en un contexto regional, así como a la formulación de estrategias
de adaptación y mitigación de sus impactos.
Cabe señalar que llevar a cabo este tipo de
investigaciones implica la inversión significativa de recursos financieros
debido a sus altos costos al utilizar plataformas oceanográficas ad
hoc.
FUENTE:
UNAM