La Fiscalía General de la República (FGR) determinó proceder
legalmente en contra de Francisco Garduño, comisionado
del Instituto Nacional de Migración (INM), por el incendio que se registró en
la estación migratoria de Ciudad Juárez,
en la que murieron 40 migrantes.
Asimismo, se procedió contra Antonio ‘N’, debido a que
incurrieron en presuntas conductas delictivas al incumplir con sus obligaciones
de proteger y brindar seguridad a las personas que se encontraban en las
instalaciones a su cargo.
De igual manera, se imputó a los servidores públicos Salvador
“N”, Juan “N”, Cecilia “N” y Eduardo “N”, por estar directamente vinculados con
las conductas que generaron los homicidios y las lesiones que sufrieron las
víctimas de estos delitos.
“Se ha procedido penalmente en
contra de los directivos del INM, Francisco “N” y Antonio “N”, quienes
incurrieron en presuntas conductas delictivas, al incumplir con sus
obligaciones de vigilar, proteger y dar seguridad a las personas e
instalaciones a su cargo, propiciando los delitos cometidos en contra de los
migrantes (artículo 214, fracción VI, Código Penal Federal)”, informó la
fiscalía a través de un comunicado.
De acuerdo con la indagatoria, al revisar antecedentes se halló
que el 31 de marzo de 2020, se dio en otro centro migratorio del INM, en
Tenosique, Tabasco, un caso semejante, dando como resultado una persona muerta
y 14 lesionados.
“Los dictámenes de la Auditoría Superior de la Federación de los
últimos años vuelven a señalar, con toda claridad, las faltas y omisiones que
en el INM se siguen cometiendo; e indican un patrón de irresponsabilidad y de
omisiones que se ha reiterado y que ha sido el causante de estos lamentables
hechos ya señalados”, detalló.
Los 40 migrantes
que fallecieron por un incendio en un centro migratorio en la frontera norte de
México no pudieron escapar porque la persona que tenía la llave no estaba,
declaró este martes el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El mandatario mexicano insistió en su habitual conferencia de
prensa, en el Palacio Nacional, que estos migrantes pretendían protestar y por
ello prendieron fuego a colchonetas, produciendo un incendio que además los
intoxicaría hasta su deceso.
“Todo indica que hubo una protesta, les prenden fuego a unas
colchonetas y se produce un incendio, pero sobre todo hay intoxicación, porque
la puerta estaba cerrada, porque quien tenía la llave no estaba”, comentó.
El presidente López Obrador descartó que se tratara de un
suicidio premeditado, pues aseveró que quienes prendieron fuego “no estaban
pensando de que la puerta estaba cerrada”.
“Nadie actúa de esa manera, no van a suicidarse, pues, no. Era
una protesta”, dijo.
Calificó que la muerte de estos 40 migrantes en el centro del
instituto Nacional de Migración (INM), de los cuales 31 han sido repatriados,
fue una desgracia.
Aunque también reconoció que acontecen muertes de migrantes a
menudo en el país.
“Lamentablemente sucede esta desgracia, pero constantemente
tenemos problemas de accidentes en tráileres, recientemente o hace
relativamente poco en Chiapas también perdieron la vida muchos migrantes”,
expresó.
Asimismo, abundó, acaba de suceder en San Luis Potosí, en Matehuala,
una situación de secuestro de migrantes por la delincuencia organizada.
López Obrador también insistió que se deben de atender las
causas que impulsan la migración de latinoamericanos hacia Estados Unidos y
aseguró que México invierte más que Estados Unidos para ayudar a gente pobre,
ya que dijo detenerlos “es muy difícil”.
“Siempre hemos planteado buscar ofreciendo trabajo, albergue,
atención, mantener en sureste a los migrantes, porque la travesía hacia el
norte es riesgosa en extremo”, dijo.
Por este incidente, ocurrido en la noche del 27 de marzo pasado
en la fronteriza Ciudad Juárez, al norte de México, hay cinco personas
detenidas, mientras que existe una orden de aprehensión adicional que no ha
sido ejecutada.
Según organizaciones civiles mexicanas, 2022 fue el año más
trágico para los migrantes en México, pues unos 900 murieron en el intento de
cruzar sin documentos desde el país hacia Estados Unidos.
La región vive un flujo migratorio récord, con 2,76 millones de
indocumentados detenidos en la frontera de Estados Unidos con México en el año
fiscal 2022.