México,
24 de diciembre. – La limpieza integral del hogar invita a alcanzar la
serenidad, y elimina cualquier tipo de atadura o cachivache molesto. Este es el
objetivo final del método de limpieza japonés Oosouji, una antigua disciplina
japonesa que propone desprenderse del pasado para mirar el futuro y entiende la
limpieza como un componente sanador y espiritual.
En
general no nos suele apetecer hacer una gran limpieza general porque da
bastante pereza al saber que deberemos gastar varias horas en ello. Sin
embargo, según el método Oosouji, esto se convierte en una oportunidad de ganar
en serenidad al eliminar ataduras del pasado.
¿Cómo
es el método de limpieza japonés?
Este
ritual que debemos aplicar en el hogar se tiene que realizar una vez por año,
por lo que japoneses lo implementan cada 28 de diciembre, buscando empezar el
año nuevo libre de cargas físicas y mentales. El Oosouji además de acabar con
el polvo, los gérmenes y las bacterias, cuenta con un poder liberador asociado
a los nuevos comienzos.
El
primer paso para desarrollar esta técnica de limpieza será fijar en qué momento
del día lo haremos, ya que tendremos que asegurarnos de que toda la familia
ayude en la tarea doméstica para evitar interrupciones. Así mismo, es
importante tener en cuenta que probablemente un solo día no será suficiente y
es conveniente reservar un fin de semana completo.
Luego
será necesario purificar el ambiente, por lo que tendremos que abrir las
ventajas y dejar que el aire fresco invada los ambientes. Este método japonés
asegura que el móvil debe estar apagado para asegurar la concentración total y
una desconexión del resto del mundo. A continuación, debemos empezar a limpiar
desde la parte superior, cubriendo los techos, limpiando las paredes y quitando
el polvo de los muebles. Posteriormente debemos aspirar y barrer.
Además,
un dato a tener en cuenta es que la limpieza debe empezar y terminar en el
mismo punto, cerrando así el círculo y dejando atrás el caos o la suciedad.
También tendremos que implementar cajas para desechar todos los objetos que no
son útiles del hogar. Este método japonés también promueve quitar las manchas
de la tapicería, reparar los muebles o sustituir las bombillas fundidas u otros
artilugios que no funcionen sí es necesario.