Comuneros de Oaxaca generan beneficios millonarios por
conservar los bosques
Las comunidades indígenas y
campesinas de Oaxaca lideran un novedoso proyecto que
les ha permitido generar millonarios beneficios económicos. Que luego son
reinvertidos en bosques y proyectos sociales. Este es la venta de aire
limpio a Silicon Valley.
El proyecto Carboin es una iniciativa comunitaria
que busca contribuir con la remoción y reducción de gases de efecto invernadero
(GEI). Específicamente con la captura de dióxido de carbono (CO2). Esto
mediante el manejo, la conservación y el aprovechamiento sustentables de
recursos naturales.
La
protección y preservación de los bosques mediante esta iniciativa ha generado 3
500 000 de dólares en beneficios en más de una década a las
comunidades. Hasta 2022, las 22.000 hectáreas destinadas al proyecto han
generado casi 275.000 créditos de carbono. Cada una de ellas representa una
tonelada de C02 que no se ha emitido a la atmósfera.
El bosque ha sido siempre un sustento para los
vecinos de Ixtlán de Juárez. En los años 80, pelearon por la
propiedad de los recursos naturales y ahora, además de asegurarse de que los
cuidan y los mantienen, tienen varios negocios comunales que dependen de ellos.
Procesadoras de madera, una fábrica de muebles, una planta purificadora de agua
o una empresa de ecoturismo.
En los últimos años, han encontrado otro valor agregado al
manejo forestal sustentable: desde 2019, destinan más de 4.800 hectáreas de
bosque al mercado de bonos de carbono, un plan por el que varias comunidades de
la zona cuidan los árboles, miden el aire limpio que generan y se lo venden a
empresas, gobiernos y particulares que quieren reducir su huella de carbono y
apoyar económicamente a quienes, como ellos, contribuyen a la mitigación del
cambio climático.