Ciudad de
México 22 agosto 2022.- La presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de
Senadores, Olga Sánchez Cordero Dávila, resaltó que el Recinto Parlamentario de
Palacio Nacional tiene un valor icono de nuestra independencia.
Durante
su intervención Sánchez Cordero reiteró, tomar conciencia de que en la
actualidad las mujeres pueden entrar a dicho recinto y ser parte de esta
transformación, sin dejar de lado que esta reapertura es parte del proceso de
un gran proyecto impulsado por el presidente, que terminará siendo una acción
de gobierno histórica, en beneficio de la preservación del patrimonio del
pueblo de México, como que a partir de hoy será la exposición ‘México en sus
Constituciones’.
Fue precisamente un 22 de agosto de 1872
cuando la República dejó de hacer resonar al interior de estos muros las ideas
que definieron al Estado mexicano; esto, debido a que un fuego, quizá
premonitorio de la etapa dictatorial que se avecindaba, destruyó el salón
original, sede del Congreso desde 1829 hasta 1872; más de 40 años.
Hasta
el momento del incendio de este salón de sesiones y desde 1824 el Palacio
Nacional había sido sede de los tres Poderes de la Unión, intención que se
materializó hasta 1829 con la edificación de este recinto que alojaba la Cámara
de Diputados, mientras que el Senado sesionaba en la Capilla de los Virreyes,
ubicada también en este Palacio Nacional.
En este recinto se expresaron y se
construyeron proyectos de nación, fórmulas de gobierno, marcos legales
propuestos por las corrientes extrema y moderada, tanto de las fuerzas
conservadoras, como del liberalismo humanista del siglo XIX.
En este recinto se gestaron los dolores de parto del país,
entre los movimientos pendulares de dos generaciones que se enfrentaron al
interior de estos muros y en los campos de batalla para definir el rumbo que
debía seguir el México independiente y soberano, sobre la pertinencia de un
sistema federal o de un sistema centralista; de un Estado laico o de uno
confesional; de un sistema de estamentos o uno con una perspectiva de igualdad
ciudadana ante la ley.
Así
mismo, aunque lamentablemente en ese entonces no todas y todos fuéramos
iguales, pues precisamente el reglamento para el gobierno interior de la Cámara
de Diputados prohibía el acceso de las mujeres a las sesiones del Congreso,
pues las mujeres no sólo no poseíamos derechos políticos, sino ni siquiera se
consideraba relevante que estuviésemos informadas de los asuntos públicos.
México vive una cuarta oportunidad para
consolidar su independencia y su papel en el concierto de las naciones. Esta
oportunidad radica en seguir avanzando en la progresividad de los derechos, en
defender nuestra democracia, pero también, y quizá de manera más importante, en
eliminar la enorme brecha de la desigualdad que priva en nuestro país desde
siempre, y que en las últimas cuatro décadas de profundizó con dimensiones
históricas como consecuencia de las políticas neoliberales.
Finalmente señaló que es tiempo de seguir
dando pasos en el desarrollo de nuestras instituciones, pasos que garanticen no
tener retrocesos en la progresividad de los derechos y la justicia social.
Sigamos avanzando en esta cuarta transformación de la República.