El costo de construir el Tramo 5 del Tren Maya a través de la
selva de Quintana Roo aumentó en 92 por ciento, al pasar de 31 mil millones de
pesos a 59 mil 603 millones de pesos, que saldrán por completo del erario.
La obra del Tramo 5, que va de Cancún a Tulum, se dividió en dos partes, la
norte y la sur, y ambas están suspendidas desde abril pasado por orden de un
juez federal, debido a que se iniciaron los trabajos en la selva sin tener
Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).
El costo actualizado fue confirmado al publicarse, el pasado viernes, la MIA
para el subtramo norte de Cancún a Playa del Carmen.
Originalmente, el trazo de todo el Tramo 5 iba por la carretera federal 307,
pero desató protestas por las afectaciones en las zonas urbanas que cruzaba y
fue movido 8 kilómetros hacia la selva, donde ahora se tendrán que desmontar
808 hectáreas de vegetación.
La licitación para la parte norte -de Cancún a Playa del Carmen- fue cancelada
en marzo de 2021, cuando el Presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó
asignar la obra a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), pero el
promedio de cotización de los 10 consorcios que ofertaron fue de 13 mil 89
millones de pesos.
Con los militares y cruzando la selva, más el importante aumento de la inflación
en el último año, el costo se actualizó a 28 mil 101 millones de pesos, es
decir 114 por ciento más caro.
Para la parte sur, en la ruta original el contrato fue por 17 mil 815 millones
de pesos, ganado en febrero de 2021 por el consorcio Grupo México-Acciona
Infraestructuras; actualizado para cruzar por la selva, construir esos 67.6
kilómetros costará 31 mil 501 millones de pesos, según la MIA.
El contrato con el consorcio Grupo México-Acciona está en proceso de darse por
terminado de manera anticipada, según fuentes cercanas al proceso.
Ahora, como ocurrió con la parte norte, se prevé que la obra sea reasignada a
la Sedena.
Al respecto, análisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y de
Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) han advertido que más del
70 por ciento de los contratos asignados por militares, en los bancos del
Bienestar y Santa Lucía por ejemplo, han sido sin licitación y otros no se han
transparentado, con el argumento de la seguridad nacional.
En total, todo lo asignado hasta ahora al Tren Maya, mediante más de 60
contratos de los que se tiene conocimiento público, es de alrededor de 212 mil
millones de pesos, 31.6 por ciento por encima del presupuesto original.
A esa cifra se deberán sumar los costos de construcción y rieles de los Tramos
6 y 7, que suman 541 kilómetros, -cinco veces más largos que el Tramo Cinco-
así como los proyectos ejecutivos, construcción y supervisión de las 21
estaciones y 16 paraderos, entre otros.