El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard,
informó este martes que subió a 50 la cifra de migrantes muertos que
fueron hallados ayer al interior de un tráiler abandonado en San
Antonio, Texas.
De los 50 migrantes muertos, 22 son mexicanos,
dos hondureños y siete guatemaltecos. El resto aún no ha podido ser
identificado.
“Estamos de luto. Tragedia enorme. México se incorpora a
indagatorias en EU, coordinados con el Departamento de Seguridad de Estados
Unidos”, lamentó el canciller en sus redes sociales.
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó
este martes la muerte de los migrantes hacinados en un tráiler y
aseguró que eso sucedió porque hay tráfico de personas y falta de controles, en
ese caso en la frontera y al interior de Estados Unidos.
La tarde del lunes fue hallado un tráiler con migrantes en
una carretera al sureste de San Antonio, Texas, informaron las
autoridades de Estados Unidos.
Un trabajador municipal que se encontraba en la carrera
en San Antonio fue alertado de la situación por un grito de auxilio
poco antes de las 18:00 horas del lunes, explicó el jefe de policía William
McManus.
Los migrantes hallados estaban calientes al tacto y
deshidratados. “Sufrían un golpe de calor y agotamiento”, aseguró el jefe de
bomberos Charles Hood.
Hasta ese momento, la cifra era de 46 migrantes muertos y
16 trasladados a hospitales, dentro de este último grupo se había identificado
a cuatro menores de edad.
El tráiler tenía placas de Estados Unidos superpuestas, para
circular sin revisión, “muy probable autoría de tratantes”, enfatizó el
canciller Ebrard al dar a conocer la noticia en su Twitter.
Por los hechos, fueron detenidas al menos tres
personas por la policía estadounidense, informó el cónsul de México en San
Antonio, Rubén Minutti.
Los tráileres se volvieron un método popular de
contrabando en los primeros años de la década de 1990, tras el incremento en
la vigilancia fronteriza en San Diego y El Paso, Texas, que en
aquella época eran los corredores más transitados por los migrantes que
entraban de manera ilegal en Estados Unidos.