El aumento de
casos de COVID-19 no da tregua a los integrantes de la clase política que cada
día suman más,mientras las autoridades sanitarias del país niegan que exista
una quinta ola, aunque la tendencia al alza así lo revela.
Ayer, el canciller
Marcelo Ebrard Casaubón detalló que siente como un catarro tras confirmar con
una prueba que dio positivo a la enfermedad por el virus del SARS-Cov-2.
El funcionario,
quien aseguró que es una “corcholata” del presidente Andrés Manuel López
Obrador rumbo a las elecciones del 2024, dijo que informará sobre su
convalecencia desde su hogar a través de redes sociales.
Quien también dio
positivo, pero la semana pasada, fue la jefa de Gobierno de la Ciudad de
México, Claudia Sheinbaum, quien este martes se incorporará de manera
presidencial a sus actividades de manera presencial.
El gobernador de
Zacatecas, David Monreal Ávila, también informó a través de un video en el que
aparece con cubrebocas, que es la primera vez que padece la enfermedad aún y
cuando su esposa, hermanos y un hijo la padeció anteriormente.
El gobernador
instó a la población a seguir con las medidas sanitarias de protección para
evitar enfermar.
Asimismo, el
presidente municipal de San Luis Potosí, Enrique Galindo Ceballos, informó que
al presentarse a la Mesa de Seguridad que se lleva a cabo cada semana, se
sometió al protocolo sanitario de Covid-19, en el cual resultó positivo.
El 9 de junio, el
director del Instituto Mexicano del Seguro Social, Zoé Robledo, informó sobre su
contagio de COVID-19, por lo que sus actividades las hizo a distancia. El 17 de
junio retomó sus actividades presenciales.
Este martes, el gobernador de
Querétaro, Mauricio Kuri, informó que ayer en la noche registró molestias
similares a un resfriado. “A primera hora de hoy me hice una prueba PCR que
resultó positiva a COVID19”.