Un cambo de calado: cuatro meses después del mediático caso
Kamila Valieva, que estalló en plenos Juegos Olímpicos de Beijing, la
Federación Internacional de Patinaje (ISU) elevó la edad mínima de los
patinadores y patinadoras artísticos a 17 años para poder participar en competencias
para adultos.
El debate sobre la corta edad de los patinadores -y sobre todo de las
patinadoras- había resurgido durante los Juegos Olímpicos a raíz del caso de la
rusa Valieva. Gran favorita para el título olímpico con sólo 15 años, la joven
patinadora se vio superada por la presión después de verse en el epicentro de
un sonoro escándalo de dopaje.
La reforma, aprobada por los delegados de 100 países durante el Congreso de la
ISU en Phuket, en Tailandia, se aplicará en dos fases. La edad mínima pasará en
primer lugar a 16 años en la temporada 2023-2024, y después a 17 años en
2024-2025.
Objetivo: proteger la salud mental de las patinadoras, cuya carrera deportiva
al más alto nivel es a menudo muy corta.
«Es una decisión histórica», afirmó el presidente de la ISU, Jan
Dijkema, después de que más de 100 países votaran para apoyar la medida y 16 se
opusieran.
El director general del organismo, Fredi Schmid, había calificado la votación
de «momento de la verdad», antes de la apertura del congreso.
«La credibilidad de la ISU será puesta a prueba», había añadido.
«Los medios y el público nos observarán de muy cerca».
La ISU indicó que el aumento del límite de edad estaba en su orden del día
mucho antes del casi Valieva y reconoció que era su deber preservar la salud de
las jóvenes deportistas.
Según una investigación realizada por la comisión de deportistas de la ISU con
1,000 patinadores y entrenadores, el 86 por ciento de ellos se pronunciaron a
favor de elevar la edad mínima.
El patinaje artístico es en efecto un deporte extenuante, en el que jóvenes
encadenan horas de entrenamientos repetitivos, saltos y piruetas, a una edad en
la que sus cuerpos están aún en desarrollo.
Para lograr triples o cuádruples saltos, una silueta alargada supone una ventaja,
y una vez superada la adolescencia, cuando el cuerpo ensancha, los saltos se
hacen más difíciles.
Las patinadoras se ven entonces reemplazadas por otras más jóvenes.
No es la primera vez en que una medida para elevar la edad de los patinadores
es sometida al voto de la ISU. En 2018, una propuesta equivalente había sido
rechazada, encontrándose sobre todo con la oposición de Rusia, nación más
potente de la disciplina.