Diego Cocca no traicionó su
estilo ni se guardó a los que todavía tenían gas… y corazón.
El gol de Julián Quiñones fue pura garra, al mantenerse en la cancha para las
labores al frente, pues el delantero Julio Furch ya había salido desde el 79′.
El DT de los Zorros dejó al colombiano al ver que no dejaba de presionar,
haciendo el sacrificio hasta media cancha, peleando cada balón, como lo hizo
para finalmente mecer las redes.
Cocca tampoco se equivocó en lanzar a Luis Reyes de volante por derecha,
volando por esa banda junto al lateral Javier Abella, con quien se combinó para
abrir el marcador.
Seguramente el argentino no olvidó que el «Hueso» también abrió el marcador en
la ida de la Final del torneo pasado, ante el León, cuando el Atlas por fin se
coronó.
Después, ya con cierto desgaste, Reyes pasó como tercer central, para ser muralla,
apareciendo varias veces, sobre todo tras la salida por lesión de Anderson
Santamaría, en el 74′.
El homólogo de Cocca, Guillermo Almada, poco pudo hacer para cambiarle el
rostro a los Tuzos, pese a su tradicional movimiento de Fernando Navarro por
Romario Ibarra, que realizó para el complemento.
El estratega atlista dejó en claro que conoce sus mejores fortalezas y las
exprimió para llevarse la ida de la Final y pegarle al Pachuca de Almada, que
batalló con la contundencia.
La partida fue de principio a fin para Cocca.