Pese a que durante toda la pandemia atendió a pacientes
Covid-19 en el IMSS, el médico general Gustavo Romero Pérez hoy está en bolsa
de trabajo en espera de una oportunidad laboral en el Instituto.
El profesional de la salud asegura que alrededor de 250 médicos se encuentran
en su misma situación.
«Trabajé hasta el 15 de abril de 2022 en el IMSS y me mandaron a bolsa de
trabajo; no hay lugar ni presupuesto para los médicos», lamentó.
«A algunos les han hablado para contratos de uno, dos o tres días y hasta
15 días como máximo, pero después se los cortan y los mandan a bolsa otra vez,
pero han sido contados».
Romero Pérez aseguró que en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) les
han dicho que como ya no hay casos Covid-19, el presupuesto se agotó.
«Ya no están dando ese presupuesto y, por lo tanto, ya no hay para
contratarnos», advirtió.
La promesa del IMSS, añadió, fue que darían la base y así sucedió con algunos
médicos especialistas, pero no con los generales.
El médico aseguró que se iría a trabajar a las zonas
marginadas del País si existieran las condiciones, principalmente de seguridad,
pero en la actualidad los profesionales de la salud son extorsionados por el
crimen organizado o secuestrados para atender a miembros de grupos criminales.
«Soy originario de Michoacán y lamentablemente, incluso ciudades grandes
están siendo atacadas por el crimen organizado. Hay médicos que han tenido que
huir de esas zonas porque los mismos grupos criminales los ahuyentan y no hay
seguridad; la misma Policía no puede hacer nada», sostuvo.
Romero Pérez acudió este jueves a Palacio Nacional a manifestarse contra la
contratación de médicos cubanos.
«Nos llama la atención que a nosotros se nos diga que no hay presupuesto,
pero sí hay presupuesto para estos médicos cubanos».
El médico inició el 7 de enero de 2020 su trabajo en el IMSS en Hospital
Temporal en el Autódromo Hermanos Rodríguez y también trabajó en el Centro de
Atención Temporal de Infectología Tlatelolco; en el Hospital General de Zona
Número 1 Los Venados y en la Unidad de Medicina Familiar número 31.
Mencionó que su sueldo mensual era de 8 mil 400 pesos al mes, pero con los
bonos de puntualidad, asistencia y riesgo Covid se incrementaba y a la quincena
podía alcanzar los entre 11 mil y 13 mil pesos.
Ante el desempleo, decidió contratarse en un consultorio adyacente a una
farmacia en Ecatepec.
«Ahí no hay condiciones laborales. No hay prestaciones ni ningún tipo de
seguridad social. A mí no me va tan mal en cuanto a consultas; obtengo 700, mil
pesos al día, pero hay compañeros que llegan sacar 30, 60 pesos al día».
Por otro lado, desde hace dos meses, el médico general Jorge Alberto Villegas
no tiene trabajo, a pesar de que durante la pandemia atendió a pacientes en el
IMSS, en el Hospital Temporal del Autódromo Hermanos Rodríguez y en el Centro
de Atención Temporal de Infectología Tlatelolco.
«El Presidente dijo que a todo el personal contratado en pandemia se le
iba a dar una basificación y eso es lo que esperamos. Queremos que nos permitan
seguir trabajando y que se den cuenta de que México tiene a sus médicos y no
hay necesidad de contratar médicos cubanos», pidió.
En el IMSS, Villegas ganaba mensualmente alrededor de 10 mil pesos y se sumaban
las bonificaciones.
«Llevó dos meses sin trabajo; quiero continuidad laboral. Han estado
ofreciendo contratos para cubrir uno o dos días», lamentó.