Cuba, 8 mayo 2022.- Bruno Rodríguez apretujó
el ramo de rosas envuelto en papel manila. Lo pedía con prisa. Por fin se lo
dieron. Un retraso inexplicable. El asunto es que Beatriz Gutiérrez Müller
apareció antes que su esposo, el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y no estaba el ramo listo. El canciller Rodríguez se lo dio ya que AMLO había
bajado del avión y saludaba a la comitiva mexicana que lo esperaba. Iba sobre
la alfombra roja desplegada en medio de las columnas de 20 integrantes de cada
lado de las Unidades de ceremonia militar que alzaban sus sables en acción de
honor. Veinte de cada lado impecablemente vestidos de azul y blanco. Una breve
marcha militar rubricó la bienvenida.
Beatriz Gutiérrez Müller caminaba de ladito. Vestida toda de azul y zapatos
blancos lucía sonriente. Su esposo igual esbozaba sonrisa pero que no ocultaba
la huella del cansancio tras una gira de 50 horas por cuatro países
centroamericanos.
Bruno topó con Beatriz y le extendió el ramo que ella recibió alegre. Lo
estrujó primero con su brazo izquierdo y luego lo pasó al derecho y caminó al
lado del Mandatario. Iba feliz. Caminó de frente, con el ramo apretujado.
AMLO llegó a Cuba media hora después de lo programado y fue recibido en la
escalerilla del avión por Rodríguez. El Presidente apareció sobre las 19 horas
con 40 minutos. Saludó formal al canciller, sin abrazo y sin aspavientos.
Caminó unos pasos y se encontró con Miguel Díaz Reynoso, el embajador mexicano
en La Habana, con quien demoró segundos intercambiando palabras. Después pasó revista
a la comitiva: los miembros de su gabinete que ya andaban por acá y el personal
de la embajada en La Habana que lo saludó con efusividad.
Bajo el manto de luto por la explosión del Hotel Saratoga, un lugar emblemático
en La Habana Vieja, que causó al menos 27 muertos, el presidente mexicano llegó
esta noche a una nublada La Habana para una fugaz visita de trabajo.
Fue trasladado a una casa de protocolo en la zona de El Laguito, a 15
kilómetros del Aeropuerto Internacional José Martí.
AMLO llegó acompañado además de su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller por los
Secretarios de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard; de la Defensa, Luis Cresencio
Sandoval, y de Marina, el Almirante José Rafael Ojeda lo que ha despertado
suspicacias sobre la carga bélica.
El tema migratorio gravitó en las reuniones con los mandatarios de cuatro
naciones centroamericanas y aunque no está contemplado en las agendas previas
para los encuentros en Cuba también podría aparecer. Y los máximos mandos
militar y naval despiertan inquietudes. Fuentes diplomáticas mexicanas
indicaron que esa presencia nada tiene que ver con un acento militar en la
visita.
AMLO tiene programadas actividades privadas durante la noche (dormir
principalmente) y comenzará las reuniones oficiales sobre las once de la mañana
luego de depositar una ofrenda floral ante el monumento de José Martí en la
Plaza de la Revolución.
El programa indica que el domingo por la mañana habrá una recepción oficial en
las escalinatas del Palacio de la Revolución para pasar a las reuniones
bilaterales. La primera entre los presidentes de México y Cuba y después entre
las comitivas.
Sobre el mediodía se realizará la ceremonia de condecoración de la Orden José
Martí que se impondrá a AMLO en un acto declarado de amistad y reconocimiento.
AMLO estará en Cuba apenas un día, algo similar a la visita de Felipe Calderón
quien al final de su sexenio visitó fugazmente la Isla.
Aunque la diferencia de ánimo es abismal. AMLO será condecorado con la Orden
José Martí, una distinción que el Gobierno isleño asigna a sus mejores amigos.
La televisión cubana y todos los medios oficiales han difundido ampliamente la
visita.
El diario oficial Granma dio cuenta en su portada de la visita y de la
biografía del tabasqueño.
Juventud Rebelde también dio cuenta de la visita y explicó que el Presidente
mexicano «ha denunciado en varias ocasiones el bloqueo económico,
comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, ha calificado a nuestro
pueblo como un referente moral y de resistencia y ha demandado recientemente
que no se excluya a Cuba y otras naciones latinoamericanas de la próxima Cumbre
de las Américas, que se celebrará en Los Ángeles».
La radio y la televisión cubanas transmitieron en vivo la llegada del
Presidente mexicano y difundieron de manera intensa los discursos de Fidel
Castro de reconocimiento a la relación con México y los dichos de Díaz Canel
sobre la relevancia de la visita de AMLO a La Habana.
Difundieron historia pura en medio de los reportes dramáticos sobre las muertes
del estallamiento del Hotel Saratoga.
