El tenista Daniil Medvedev, actual número dos
mundial, no participará en Wimbledon este año, ya que los organizadores
excluirán a los jugadores rusos y bielorrusos debido a la invasión de Ucrania
por Rusia.
El tema fue difundido primero por la prensa y luego
confirmado por el mismo torneo, a través de un mensaje.
«En las circunstancias de tal agresión
militar injustificada y sin precedentes, sería inaceptable que el régimen ruso
obtuviera algún beneficio de la participación de jugadores rusos o bielorrusos.
«Por lo tanto, es nuestra intención, con
profundo pesar, rechazar las entradas de jugadores rusos y bielorrusos al Grand
Slam de Wimbledon 2022», dice parte del comunicado.
El torneo comienza el 27 de junio.
Desde el inicio de la ofensiva rusa el 24 de
febrero pasado, los tenistas rusos y bielorrusos han podido continuar
participando en las competiciones ATP y WTA con bandera neutra.
Este dispositivo debía extenderse a los tres
torneos del Grand Slam por disputar en 2022, aunque la Federación Internacional
(ITF) haya prohibido a los equipos de los dos países participar en la Copa
Davis y en la Copa Billie Jean King (antigua Copa Federación).
Sería «inaceptable» prohibir a los
tenistas rusos que participen en el torneo de tenis de Wimbledon, consideró el
miércoles el Kremlin, reaccionando a estas informaciones de la prensa
británica.
«Una vez más, convierten a los deportistas en
rehenes de prejuicios políticos, de intrigas políticas (…) Es
inaceptable», dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
«Teniendo en cuenta que Rusia es un país muy
fuerte en tenis y que nuestros deportistas figuran en lo alto de las
clasificaciones mundiales, su exclusión tendrá un impacto en la propia
competición», añadió Peskov.
Algunas fuentes indicaron al Times que tras dos
meses de conversaciones, los organizadores de Wimbledon han preferido prohibir
la participación de jugadores rusos y bielorrusos más que adherirse a una
solución de compromiso propuesta por el gobierno británico.
Estas negociaciones buscaban que estos jugadores,
incluidos Medvedev y la semifinalista del individual femenino en Wimbledon el
año pasado, la bielorrusa Aryna Sabalenka, firmen una declaración según la cual
no harían comentarios favorables al presidente ruso Vladimir Putin.
Los organizadores de Wimbledon estiman que la
firma de tales declaraciones podría tener un impacto negativo sobre las
familias de los jugadores.
Es probable que esta medida de exclusión se
aplique a todos los torneos británicos sobre hierba de este año. La Lawn Tennis
Association (LTA), que supervisa los principales torneos de preparación de
Wimbledon, como Queen’s o Eastbourne, declaró que seguiría el ejemplo de
Wimbledon.
Reacciones discretas
«Es necesario un alineamiento, para que sea
claro y comprendido», declaró Scott Lloyd, director general de la LTA.
«Es de una importancia capital».
Los jugadores rusos y bielorrusos han sido
discretos en su condena del conflicto, aunque el ruso Andrey Rublev, octavo del
mundo, lanzara «no a la guerra por favor» en una cámara de televisión
durante una competición en Dubai, poco después del inicio de la invasión.
«Quiero paz en todo el mundo», se
contentó con decir Medvedev, que se recupera en la actualidad de una operación
de hernia y es duda para Roland Garros.
La bielorrusa Victoria Azarenka, ex número uno
mundial y ganadora en dos ocasiones del Abierto de Australia, se mostró más
franca.
«Es desgarrador ver cómo personas inocentes
se han visto afectadas y continúan viéndose afectadas por esta violencia»,
declaró la tenista de 32 años en marzo.
«Siempre he visto a ucranianos y bielorrusos
como gente amistosa y solidaria los unos con los otros. Es difícil ser testigo
de la separación violenta que tiene lugar en la actualidad», señaló
Azarenka, actual número 18 de la WTA.
Bielorrusia está considerada como un aliado de
Rusia y ha facilitado la invasión, permitiendo a las tropas franquear su
frontera con Ucrania.