Al cuarto trimestre
del 2021, el 40.3 por ciento de la población mexicana se encontraba en pobreza
laboral al tener un ingreso laboral inferior al costo de la canasta
alimentaria, porcentaje mayor al 38.9 por ciento registrado dos años atrás,
previo a la pandemia.
Según datos del Coneval, la población en condiciones de pobreza laboral alcanzó
un máximo de 46.0 por ciento en el tercer trimestre del 2020 como resultado de
la pandemia, y pese a que en trimestres posteriores este porcentaje bajó, aún
se encuentra por arriba de los niveles prepandémicos.
Héctor Magaña, analista del Centro de Investigación en Economía y Negocios del
Tec de Monterrey, expuso que, aunque algunas personas recuperaron su fuente de
trabajo, fue con una remuneración inferior a la que tenían previo a la
pandemia, y además el aumento en precios elevó el costo de la canasta
alimentaria.
El costo promedio de la canasta alimentaria en la zona urbana se elevó 15.4 por
ciento en los últimos dos años, a mil 844 pesos. En la zona rural el costo
subió 18.5 por ciento, a mil 345 pesos.
En un documento sobre la metodología para construcción de las líneas de pobreza
por ingresos, el Coneval explica que la estimación del costo de la canasta
alimentaria se basa en los patrones de gasto de los hogares para aproximarse a
los valores de consumo de energía y micronutrientes.
Y la situación podría ser aún peor a medida que empiecen a registrarse las
alzas que los precios de alimentos y energéticos han tenido en el primer
trimestre del 2022, a raíz de la invasión rusa a Ucrania.
«Resulta probable que el nivel de precios de nuestro País continúe en
ascenso al menos durante la primera mitad del año en curso, afectando con ello
el poder adquisitivo de las personas, particularmente aquellas que perciben los
rangos salariales más bajos», advirtió Magaña.
En Nuevo León también aumentó el porcentaje de la población en condiciones de
pobreza laboral, al pasar de 21.2 al cierre del cuarto trimestre del 2019 a
23.1 por ciento al cierre del año pasado.
No obstante, Nuevo León se ubicó como la tercera entidad con menor porcentaje
de personas cuyo ingreso laboral no alcanza para adquirir la canasta básica.